Con los impuestos del alcohol el estado español se ingresa aproximadamente unos 10.000 millones de euros al año.
Con los impuestos del tabaco el estado español se ingresa aproximadamente unos 7.000 millones de euros al año.
Beneficios destinados, por ejemplo, a los sueldos de los militares y fuerzas represivas, las infraestructuras de las 'misiones humanitarias', medios de transporte, combustibles, armamento y munición.
Todo financiado con el dinero (extra) del fumeteo y el emborrachamiento.
Las drogas 'legales' son una herramienta más que tiene el estado para mantener dominados a los individuos, a la vez que financian proyectos y opciones monetarias que ellos mismos no han decidido.
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